Eugenia Codina Desde mi ventana

lunes, 14 de abril de 2008

El Reloj II

Es un consuelo ver que, mundialmente hablando, somos capaces de hacer bicicletas y ordenadores, casarnos y morirnos más deprisa que de cargarnos una especie o de hacer aumentar la población presa de los Estados Unidos.

Hay esperanza para el mundo.

No hay comentarios: