Eugenia Codina Desde mi ventana

martes, 30 de diciembre de 2008

Cuento de Navidad: qué bello es vivir


Barcelona, 25 de diciembre del 2008

Esta foto tomada el día de Navidad es la más reciente de mi familia. En la foto falta mi madre, a la que todos echamos profundamente de menos. Mi madre tiene Alzheimer, la enfermedad de la que vamos a morir la gran mayoría de nosotros si sobrevivimos los setenta.
Según los datos la Organización de Geriatría, una de cada cuatro familias españolas, tienen algún familiar con demencia tipo Alzheimer. Esto significa que casi medio millón de españoles la padecen. Por otro lado una de cada 10personas de más de 65 años de edad y casi la mitad de los mayores de 85 padecen Alzheimer. Se cree que en el año 2025 la cifra de afectados subirá a 22 millones de personas en todo el mundo.

Una de las compañeras de residencia y enfermedad de mi madre es una dulce nonagenaria que responde al nombre de Teresa. Teresa está en una silla de ruedas porque ya no puede andar. Está tan sorda que no puede comunicarse con los demás. En realidad, Teresa ya no puede hacer prácticamente nada. Sin embargo, puede escribir algunas palabras y dibujar algún trazo simple. Su hija durante las visitas, la estimula a escribir en un pequeño bloc que siempre lleva con ella. Ayer, Teresa escribió con su inseguro trazo, tres palabras. Su hija, asombrada, me las enseñó. Eran tres palabras sorprendentes y emocionantes: Viva la vida.

El misterio de la ausente existencia de mi madre y del apego incondicional a la vida de Teresa me recordaron la película Qué bello es vivir.

Qué bello es vivir (It´s a wonderful life) el clásico de Frank Kapra que se repite cada Navidad en las televisiones del mundo, gira en torno de un dato filosófico: ¿que hubiera ocurrido si yo no hubiera nacido?. El protagonista sufre un revés económico que quiere solventar suicidándose de forma que su familia pueda cobrar el seguro. Un angel que tiene que hacer méritos para subir de categoría le muestra, durante la noche de Navidad, lo que hubiera sido de su familia y su pueblo si él no hubiera existido. La moral final de la historia es que la vida de uno está entrelazada con la vida de los seres que te rodean y que no es rico el que tiene mucho dinero sino el que tiene muchos afectos.

Mucho hubiera faltado si mi madre no hubiera existido:

jueves, 25 de diciembre de 2008

Navidad 2008


Ocell espiritual (Pájaro espiritual), Agustí Codina, 2008

Navidad consumista,
tú vuelves, cada año.
Al pobre mileurista,
seguro, le haces daño.

Al rico omnipotente;
le hinchas la vanidad,
y piensa irreverente,
que de él es, la Navidad.

Me invade desazón,
pues, quizá tenga razón.

Poema: Navidad, Agustí Codina, 2008

lunes, 22 de diciembre de 2008

¿Cuándo sabe una que está en Barcelona?

Más zapatos

Nuevas medidas de seguridad en todas las conferencias de prensa del presidente Bush.



(Me encantan los zuecos holandeses....)

domingo, 21 de diciembre de 2008

Ah, qué reconocible

Forges, en El País del domingo, 21 de diciembre del 2008

sábado, 20 de diciembre de 2008

El chico del gimnasio

Este es un cuento que escribí hace años y que, casualmente, he vuelto a encontrar. Un buen momento para colgarlo en este blog como lectura vacacional.

Margarita Zorbalá en 1982

EL CHICO DEL GIMNASIO

Gracias a él, mi interés por la gimnasia aumentó en picado. La gimnasia o educación física, como pomposamente se describía en el boletín de notas del instituto, siempre había sido una tortura para mí, gracias a las ineptas profesoras de la falange.

Era el instructor en el gimnasio donde iba cada semana para hacer mantenimiento, es decir, para mantener los michelines donde están sin que aumenten.

Era un gimnasio de yuppies en un barrio rico de Rotterdam. La Universidad donde yo trabajaba tenía un contrato con el gimnasio para que el personal universitario pudiera hacer ejercicio por un módico precio: la única forma de movilizar a los intelectuales con los músculos atrofiados (excepto los de la cabeza) y un sueldo que hay que buscar con lupa.

La mayoría de hombres y mujeres que iban allí a hacer ejercicio eran evidentemente trabajadores del sector servicios. O hacían un trabajo ejecutivo, oficinesco o intelectual, o así lo querían aparentar.

Los instructores también estaban seleccionados de forma que no despertaran complejos a los hombres canijos, canosos y gafosos que acudían regularmente a mantener los michelines. Algunos de los instructores estaban francamente escuchimizados. Algunos, y algunas, oscilaban entre los cuarenta y sesenta años, de forma que nadie se sintiera ni demsiado viejo, ni demasiado gordo, delgado o calvo comparado con ellos.

Destacaba, pues, entre ellos, la figura de mi chico. Era alto, rubio, guapo, y tenía el tipo en forma de T mayúscula. No se le podia sacar ningun defecto. Tenía unos preciosos ojos azules y una voz muy educada. Yo siempre había sentido preferencia por el hombre nórdico, normalmente más alto y rubio que el latino. Será porque yo tengo un físico bastante meridional, producto de mi procedencia barcelonesa. En cambio, mis amigas holandesas flipan con Antonio Banderas, o cuando ven fotos de mi hermano

Pero volvamos a la razón de esta historia y de mi buena forma física. La primera vez que le vi pensé que era el hombre más guapo que había visto en mi vida. Entonces decidí que, definitivamente, los hombres más jóvenes (que yo) tenían mucho que ofrecer. Hasta aquel momento yo siempre había sido más joven que mis compañeros, pero a partir de los 30 una se da cuenta de que la generación de los hermanos pequeños ya ha crecido. Las ventajas de un chico de esta edad, me decía yo para mis adentros, es que tienen mucho entusiasmo, ganas de aprender, miran la vida como si nunca se fuera a acabar, y básicamente son más guapos.

Despues de superar mis escrúpulos inciales, entablé mi primera conversación con él. Lo primero que me preguntó es cómo me llamaba, edad (pregunta difícil), domicilio (el muy ladino) y teléfono (¡ajá!) y si pagaba al contado. Sospeché que la relación empezaba con buen pie, en vistas de la información personal que me habia pedido.

Mi afición por la gimnasia aumentaba con cada mirada de sus prometedores ojazos. Conseguí llegar a entrenar tres veces a la semana. Para descubrir los días que trabajaba hice un cálculo de probabilidades. Durante dos meses fui al gimnasio cada vez a una hora distinta, hasta que conseguí cartografiar su esquema de trabajo.

Una vez superada esta primera etapa de reconocimiento, pasé a la segunda fase. Vi que la cosa tenia futuro el día que se me acercó cuando yo estaba haciendo un ejercicio de triceps (el músculo más descuidado de la anatomía femenina según me han dicho los aerobicólogos). Me dijo, en su voz tan armoniosa, que tal como lo estaba haciendo no servía para nada. Que tenía que apoyar el codo en el soporte. Naturalmente, yo veía perfectamente a través de la transparencia de la excusa. Este primer contacto quedó en esto.

A partir de etonces noté que me miraba con insistencia. Yo le dedicaba mis mejores miradas de Minnie Mouse, pero de alguna forma no lográbamos salir de esta dinámica de flirteo a distancia. Ya empezaba a desesperar cuando la gran oportunidad se me presentó.

Estaba yo en la cola de la verdura del supermercado al lado del gimnasio cuando noté un saludo a mi espalda. Me di la vuelta y detrás de mí, con su carrito, estaba él. Yo le devolví el saludo entusiasmada y le pregunté alguna idiotez del estilo '¿estás comprando?'. Mi sonrisa se congeló al ver una chica joven y rubia que le ponía insistentemente una coliflor debajo de la nariz mientras me dirigía una mirada gélida, que decía: ES MIO con mayúsculas. Acepté mi derrota y me fui a buscar consolación en la sección de helados (Hagen Dass, praliné con nueces, para casos de extrema gravedad).

En el momento que iba a poner el helado letal en mi carrito de la compra, note que alguien me tocaba tímidamente el hombro. Era él.

- Oiga, me dijo, -hace tiempo que quería preguntarle algo...

El que me tratara de usted me hizo despertar cierta desconfianza sobre el curso que estaba tomando la conversación.

- Es que verá, eh...¿es usted griega?-.

- Nooo, -le respondí yo cuidadosamente, no tenía ni idea de por donde me iba a salir.

- Es que se parece usted mucho a Margareta Zorbalá. Es una cantante griega.

- Ah, no pues no la conozco, porqué ¿te gusta?- dije aprovechando la ocasión para hacer conversación y para subrayar el tuteo.

- A mi no, qué va, pero a mi madre sí. Cuando yo era pequeño mi madre la ponía muy a menudo los sábados por la mañana. Esto era antes de que mis padres se separaran. Me recuerda mi infancia feliz, cuando todos estábamos juntos-, me dijo con sorprendente sinceridad. A estas alturas de la conversación, el romanticismo que yo había adjudicado a nuestra relación, empezaba a desintegrarse.

- Usted me la recuerda, será porque son de la misma edad- acabó por remachar el clavo.

En aquel momento llegó la rubia, ahora con un amenazador pepino en la mano, y le tiró de la chaqueta con impertinencia.

- Bueno, me tengo que ir, que aún tenemos que hacer las compras del fin de semana. Perdone si la he molestado...-.

¿Qué le podía decir? : - ¿Cómo me puedo enfadar con alguien que me llama vejestorio y a la vez me asocia con los momentos más felices de su vida?-.

Y de verdad que esto es lo que sentía.

jueves, 18 de diciembre de 2008

In Memoriam



De El País 18-12-2008

OBITUARIO
Francisco Casavella, ganador del Premio Nadal
Un infarto se llevó ayer a los 45 años al autor de 'Lo que sé de los vampiros'

IGNACIO VIDAL-FOLCH


Francisco Casavella era un espíritu independiente y un hombre libre. Era también un escritor de raza, lleno de talento y ambición, autor de novelas logradas, de larga extensión, la última de las cuales, Lo que sé de los vampiros, magníficamente ambientada en España, Roma, Alemania, Dinamarca y otros países europeos durante el siglo XVIII y con la que daba un sorprendente cambio de registro temático, fue distinguida con el último Premio Nadal. Tenía además un exquisito gusto literario, como saben los lectores de EL PAÍS que durante los últimos años han podido disfrutar de los comentarios y análisis, especialmente sobre literatura anglosajona, que él redactaba con enorme placer, placer que luego el lector compartía. Ayer, Casavella -cuyo verdadero nombre era Francisco García Hortelano- falleció a los 45 años a causa de un infarto en Barcelona.

Su compromiso con la escritura le llevaba a retirarse y permanecer recluido durante largas temporadas en uno de esos pueblos de veraneo, llenos de bloques de apartamentos, que durante el resto del año -precisa-mente cuando allí se instalaba Casavella con su ordenador y su manus-crito- se vacían y se convierten en pueblos fantasmales.

Pero, periódicamente, pasaba algunos días en Barcelona. Entonces sus amigos disfrutaban de su agudo sentido del humor, de su espíritu crítico agudo pero sin acidez, de su enorme y cabal humanidad, de una forma de ser alérgica a todas las bajezas de la vida social, que le producían una especie de aversión natural, y de su conversación, en la que sin alardes ni pretensiones brillaba con un ingenio rapidísimo, impostadamente canalla, y sólo cuando le preguntabas desplegaba sus conocimientos sobre literatura, música popular y cine, que eran mucho más vastos y profundos de lo que pudieran creer los que no le preguntaban. Pero esos lapsos barceloneses se espaciaban cada día más y Casavella se dejaba ver cada vez menos.

Su irrupción en la literatura fue deslumbrante, con una novela, El triunfo, de 1990, ambientada en el Paralelo barcelonés y las calles contiguas que por un lado suben la ladera de Montjuich y por otro llevan al barrio chino, ahora llamado El Raval. En sus páginas recreaba la vida del barrio, la música rumbera de los gitanos barceloneses, las ambiciones de promoción y de una vida mejor de los jóvenes y marginales protagonistas, el más conmovedor de los cuales, parecido a un personaje de Calvino pero empujado por una fatal misión hamletiana, vivía en los tejados de esas callejas tortuosas.

El ritmo veloz y magistralmente sostenido del relato, el fino tejido lingüístico y el suspense policial de la trama llamaron la atención de varios productores cinematográficos, pero la película no se llegó a filmar hasta muy recientemente. A partir de entonces Casavella colaboró durante varios años con varios cineastas españoles, surtiéndoles de guiones, el más conocido de los cuales fue el de Antártida, una road movie que empieza en Barcelona, cruza España y termina en Galicia, la región de la que procedía la familia y el padre de Casavella, maestro de escuela también recientemente fallecido.

Sin embargo, le apartaron del cine las exigencias de redacción de El día del Watusi, fresco colosal de la historia reciente de España compuesta por Los juegos feroces, Viento y joyas y El idioma imposible, narrada sobre la peripecia de la vida de Fernando Atienza, un advenedizo en el mundo de los negocios y la política. Dotada de una compleja y brillante estructura formal, de mil peripecias y de algunos pasajes de una comicidad inolvidable, El día del Watusi vino a confirmar su talento y ha sido traducida a las lenguas europeas más importantes. Entre El triunfo y El día del Watusi, Casavella publicó otras dos novelas: Quédate -ambientada en el mundo de la música pop y con vetas humorísticas y experimentales- y Un enano español se suicida en Las Vegas, otra historia del barrio chino, en el que dos hermanos, el uno más inclinado que el otro a la mala vida y a la deslealtad, cruzan sus destinos. Recientemente se ha publicado también El secreto de las fiestas, reescritura de una deliciosa novela que le fue encargada para un público infantil.

Es una gran lástima que se haya muerto tan pronto un escritor tan bueno y ejemplar, y un hombre tan digno. Yo le echaré mucho de menos.

miércoles, 17 de diciembre de 2008

Mal periodismo

Un artículo de Arcadi Espada sobre el incidente del periodista que lanzó el zapato al presidente norteamericano George Bush con una perspectiva original.

Plantea dos cuestiones:
a. un periodista que da preferencia a sus sentimientos y a su ideología por encima de la objetividad inherente a la profesión mientras que está utilizando los privilegios que le da su condición de periodista para entrar en la rueda de prensa, está actuando fuera de los límites de su profesión. Por lo tanto, su comportamiento es el de un activista político no el de un profesional del periodismo. O eres lo uno o eres lo otro, pero no las dos cosas a la vez.

b. es la más espinosa. Si tirar un zapato es el insulto más grande que existe en el mundo árabe, ¿por qué el periodista le lanza el zapato a un norteamericano en lugar de lanzarlo a un líder de las facciones islámicas que están llevando a cabo la guerra en Irak o a algún líder árabe mal gobernante? Evidentemente, es mucho más peligroso hacer lo segundo que lo primero.

Es más facil agredir a un dirigente democráticamente elegido que a un tirano o a un señor que lleva pistola y que te puede disparar.

Miedo.

martes, 16 de diciembre de 2008

¿Y dónde están los calcetines?



Viñeta de Kamagurka en el NRC Handelsblad, el 15 de diciembre del 2008

lunes, 15 de diciembre de 2008

Ventanas y bicicletas rotas


Una costumbre que tengo desde hace muchos años es arreglar mi mesa de trabajo antes de ponerme a trabajar. En realidad, me gusta tener toda la casa arreglada antes de ponerme a hacer algo, incluso la cama hecha. Asumía que esto tenía que ver con la necesidad de ordenar mi alrededor externo antes de ordenar, intelectualmente, el interior. Sin embargo, acabo de recibir noticia de una investigación que me ha dado otra perspectiva sobre mi comportamiento.

Carmen B. me envía un artículo sobre el estudio realizado en la universidad de Groningen (Holanda) por Kees Keizer. Según esta investigación el desorden de la calle incrementa el crimen. Para llegar a esta conclusión, Kees Keizer y colegas llevaron a cabo seis experimentos de campo en los cuales pusieron a prueba si la gente estaba más dispuesta a desafiar las normas sociales cuando se les mostraba evidencia de que otra gente lo estaba.
Durante el transcurso de los experimentos, Keizer observó que la gente estaba mucho más inclinada a desobedecer avisos públicos cuando parecía que otra gente también lo estaba haciendo: ante la presencia de graffiti o el sonido de fuegos artificiales los ciudadanos estaban más dispuestos a tirar cosas al suelo o al robar. Keizer puso cinco euros en un buzón reluciente y luego los puso en un buzón con pintadas. La cantidad de viandantes que se llevaban los cinco euros del segundo buzón era significativamente más alto.
Esta investigación sugiere que mientras un cierto comportamiento de violación de normas se vuelva más común, este también tendrá una influencia negativa en la conformidad respecto a otras normas y reglas sociales.
La importancia de esta investigación se basa en que refuerza la teoría de las Ventanas Rotas, sobre la que se ha basado y se basa la política de prevención del crimen en ciudades como Nueva York y Rotterdam.

Según esta teoría, si hay una ventana rota en un edificio es más facil que se rompan otras y que cada vez se cometan más crímenes en la zona. Una forma de prevención es conseguir que las ventanas estén arregladas, que la calle esté limpia, que el grafitti no domine todo el panorama.
Este año el ayuntamiento de Rotterdam ha hecho un gran esfuerzo para recoger todas las bicicletas abandonadas por la ciudad, en total han recogido la impresionante cantidad de 4.600 bicicletas abandonadas, oxidadas y rotas. Esta medida que me parecía exagerada la primera vez que la oí, entiendo ahora que forma parte de esta política de prevención de Ventanas Rotas.


No solo en el mundo físico se aplica la teoría de las Ventanas Rotas, también en el mundo virtual se constata una degradación de los ámbitos en el momento que se rompen las reglas del juego. El llamado vandalismo online también se puede prevenir con una moderación que libre el ámbito de grafitti y basura. Sobre este tema escribe en su blog emekaeme: Ventanas rotas y vandalismo online.

Así que, ahora comprendo, que mi costumbre de arreglar mi despacho antes de empezar a trabajar ha evitado que me dedicara al mundo del crimen...


"The Spreading of Disorder," por K. Keizer; S. Lindenberg; L. Steg en University of Groningen en Groningen, Holanda.
Contactar: Kees Keizer en: +31-50-36-36-461 (tel.), ó k.e.keizer@rug.nl (correo electrónico)
Este artículo será publicado en línea por la revista Science, en el sitio web Science Express, el jueves, 20 de noviembre. Ver http://www.sciencexpress.org.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

El perro con empatía

Los derechos de los animales se está conviritiendo en una de las discusiones de este siglo. El filósofo Peter Singer con su movimiento Gran Simio ya ha llegado a Espana, donde ya hay una propuesta de apoyo al proyecto.

Para los que dudamos sobre la posición de los animales en nuestra sociedad, recomiendo mirar este vídeo.Son unas imágenes captadas casualmente por una cámara de vigilancia en una autopista chilena. Un perro ha sido atropellado y otro, con riesgo de su propia vida, lo recoge y lo arrastra fuera de la autopista.
Si esto no es capacidad de ponerse en el lugar de otro, no sé lo que es.

martes, 9 de diciembre de 2008

Algunos pensamientos sobre Internet


¿Cuánta información personal dejamos en internet? La red ya contiene nuestro alter ego digital. La persona real y la que se refleja en las búsquedas de google pueden ser la misma persona o no. Según la oficina de Seguridad Europea: en el momento en que ponemos información personal en internet perdemos el 70 por ciento de control sobre nuestro "yo".

Un pensamiento provocador en este artículo de La Vanguardia es que las clases sociales en el futuro no van a ser económicas ni culturales sino que va a ser el saber como usar los instrumentos digitales lo que va a separar un grupo del otro. No solo va a ser una diferencia generacional sino también social.
Lo compruebo cada día en la enseñanza: hay una gran diferencia entre los profesores que saben usar los instrumentos y los que no. En este momento la mayoría de los alumnos va por delante de los profesores en el uso de Google y de Wikipedia pero si tienen el sentido común para usarlo adecuadamente, es otro tema.
Los que sean capaces de acceder a la información antes que los otros van a tener una gran ventaja. Los que sepan como bloquear la información a los demás, van a tener una ventaja aún mayor.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Los regalos hay que merecerlos


Ayer, 6 de diciembre fue el cumpleaños de San Nicolás. Para celebrarlo trajo regalos a los niños y adultos que se portaron bien durante el año.
Sinterklaas, como se llama en holandés, no se conforma con traer un regalo. También ha escrito un poema en el gran libro que siempre lleva consigo, en el que rememora todo lo que ha hecho este año el que recibe su regalo. Y para hacerlo aún más personal, Sinterklaas no lo he empaquetado con papel de regalo sino que lo ha escondido dentro de una sorpresa, llamado ´surprise¨ cuyo objetivo es hacer lo más dificil posible para el que recibe el regalo el poder abrirlo. La surprise además, se refiere al contenido del regalo en sí o a alguna carácterístia de la persona que lo recibe.

La laboriosidad protestante se refleja en esta fiesta, aunque no todos los que la celebren sean necesariamente creyentes. Aquí no hay lugar para improvisaciones católicas. No está bien visto que uno se escabulla de la situación gastando mucho dinero en un regalo, tal como podemos hacer en el Sur de Europa. Incluso esta puerta de escape está cerrada porque es muy normal llegar a un acuerdo sobre el máximo de dinero que se va a gastar cada uno para el regalo. La cantidad puede variar entre los10 y los 50 euros. Es decir, lo que tiene valor es el esfuerzo que ha puesto el que regala, no tanto en el valor del regalo en sí.

El resultado es que esta fiesta, otrora una fuente de placer y unión familiar, se ha convertido en una de las fuentes de estrés más importantes. En las listas de factores que povocan más tensión en los holandeses se cuenta la fiesta de Sinterklaas con sus poemas y sus paquetes.
La vida moderna, con su combinación de familia y traabajo, no tiene demasiado lugar para una fiesta que exige tiempo y esfuerzo personal.

Este breve vídeo refleja como se sienten muchos holandeses durante los primeros días de diciembre: a esta escena hay que añadir tres hijos y dos empleos.

jueves, 4 de diciembre de 2008

domingo, 30 de noviembre de 2008

438,2888 horas vividas

1958
Desde mi nacimiento, el lunes 1 de diciembre de 1958, el reloj de Can Palau, como se le conoce popularmente, empezó a contar los segundos de mi vida. Este reloj en la calle Pelayo encima de la tienda de miniaturas y modelismo ¨Palau¨ sigue siendo el mismo que se podía ver hace cincuenta años desde el balcón de la casa en la calle Balmes donde nací.


1968
En los años sesenta apareció el reloj giratorio del Banco de Bilbao en la confluencia de la calle Vergara con la Plaza de Cataluña. Desde la galería posterior de mi casa se veía a lo lejos este enorme reloj que se empeñaba en contar cada minuto de mi vida barcelonesa. Al cabo de cuarenta años aún sigue dando sus vueltas de rigor para recordarles a todos los viandantes de la Plaza Cataluña el paso del tiempo.


1978

Mi adolescencia y juventud transcurrió en el barrio de Gràcia, cuya plaza del ayuntamiento también se conoce como la Plaza del Reloj por donde he pasado innumerables veces en mi vida. La Plaça del Rellotge sigue allí y su reloj sigue contando las horas de ocio de sus visitantes como contó las mías.



1988
Ahora, en Hillegerberg, veo cada día el reloj de la Hillegondakerk. Su campanario le pone también banda sonora a las mañanas de domingo y fiestas de guardar. Las horas, en holandés, en español o en catalán pasan igual.



1998
Cada mañana me saluda este reloj desde la ventana de mi cocina. Me lo regaló mi hermano hace diez años y desde entonces se ha convertido en mi conciencia cronológica matinal. Bondia.



2008
Y esto es lo primero que oigo y veo cada mañana: el despertador.

sábado, 29 de noviembre de 2008

Soylent Green en el 2008


27 de noviembre
Aparece una website llamada IRFAKen la que la artista Mieke Smits cuenta que hace arte con piel y grasa. De la grasa de liposucciones hace galletas que envía al tercer mundo para alimentar a los pobres. Mieke Smits ofrece una liposucción gratis para uno de los primeros que se dirijan a la web con este deseo. La noticia ha llegado a todo el mundo.
El asombro es general, la decadencia del mundo occidental ha llegado hasta el punto de que Soylent Green se ha hecho realidad.

28 de noviembre
Al cabo de unas horas se ha hecho público que la website IRFAK no es una nueva forma de ONG sino una nueva forma de arte. No es cierto que Mieke Smits haga galletas con grasa humana, se trataba de una forma de hacer patente la sociedad consumista y obsesionada con el físico en que vivimos.

29 de noviembre
Mieke Smits está asombrada de que se le hayan ofrecido cien personas para la liposucción por que se han tomado en serio la cuestión de las galletas. Es decir, que al menos cien personas han pensado que era una situación beneficiosa para todas las partes si se dejaban succionar la grasa y la podían enviar al tercer mundo.

Es decir, Mieke Smits ha llegado tarde. No ha intuído el signo de los tiempos: quería sorprender a un público que ya no existe. Un público que no creía en que se puede cambiar el propio cuerpo a voluntad. Un público que se sentía culpable de que hubiera un tercer mundo.

Esta ¨performance¨ hubiera horrorizado hace unos años, ahora ya nos lo tomamos en serio y nos parece aceptable.

Así están las cosas

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Las cuatro estaciones

Sinterklaas o San Nicolás, trae regalos a los niños que han sido buenos el 5 de diciembre por la noche. Sus ayudantes, que son pajes, se llaman todos genéricamente, Zwarte Piet, es decir Pedro el negro, nombre que no se refiere, afortunadamente, a su raza como piensan muchos holandeses políticamente correctos, sino al hecho de que el paje de Sinterklaas tiene que bajar por la chimenea para dejar los regalos. De ahí que quede completamente manchado de hollín.

Sinterklaas llega dos semanas antes a Holanda. Llega desde Madrid en barco (cosas de la ilógica de la tradición). Durante dos semanas los niños ponen el zapato y a lo mejor les cae algún regalito, como preparación del regalo grande del cinco de diciembre.

Este sábado fui a recibir a San Nicolás al puerto de Hillegersberg, donde vivo.

Esto era el paisaje a las 3 de la tarde:

Esta era la tumultuosa llegada de Sinterklaas en olor de multitudes a las 3 y 10 minutos:


Esto era el paisaje a las 3 y 15 minutos, cuando me tuve que meter en casa corriendo a causa de la nieve:


Este era el paisaje de Hilllegersberg a las 3 y 25 minutos, había dejado de nevar y salía el sol:



Ya lo dicen los holandeses: el servicio meteorológico en Holanda es la mar de facil ya que siempre puedes acertar. Tenemos todas las estaciones en el mismo día.

martes, 25 de noviembre de 2008

Católicos y protestantes

Este año para el día de mi santo, el 15 de noviembre, mi marido me regaló un dvd de Dave Allen.
Le vi por primera vez a principios de los ochenta, al llegar a Holanda. Entonces ya se cogían los canales por cable de varios países europeos, entre ellos Inglaterra. En la BBC vi por primera vez a este cómico irlandés.

Durante un sketch sobre uno de sus temas favoritos, la religión (católica), me dio un ataque de risa, lo cual en sí no es muy chocante, sino fuera porque a mi marido no se le movió ni un músculo de la cara. Solo me miraba a mí con cara de besugo preguntándose qué era lo que me hacía tanta gracia.

Aquel día los dos nos dimos cuenta de que veníamos de mundos distintos. Hasta aquel momento habíamos disfrutado de las similitudes entre los dos a pesar de venir de países diferentes. Pero Dave Allen nos dejó claro que yo me reía porque había sido educada como católica y que él no se reía porque habías sigo educado como protestante reformado.

El sketch en cuestión:

Theo, mi marido no le veía la gracia ni a este sketch ni a otros en los que Dave Allen sacaba altares, cálices, monaguillos, obispos y demás atrezzo de la iglesia católica.
Los ritos protestantes son muy sobrios, solo hay un pastor haciendo un sermón y el resto del oficio es de un alto valor participativo, con todos congregantes cantando salmos. Así como en la misa católica uno podía ensoñarse mientras hacía ver que escuchaba al cura, en los ritos protestantes uno no puede bajar nunca la guardia, porque está ¨trabajando¨ en todo momento.

Así que este fue nuestro primer choque cultural como pareja. Nos ayudó a conocernos y comprendernos mejor. Y Dave Allen siempre ha quedado como uno de los recuerdos y aficiones compartidas en el nuevo mundo que nos hicimos entre los dos.

Dave Allen se reía de la religión católica como solo los católicos saben hacerlo. Su escepticismo religioso fue convirtiéndose en declarado ateísmo, lo cual dio lugar a grandes actuaciones a medida que se iba haciendo mayor y decía cada vez más lo que pensaba.
En este vídeo de cinco minutos subtitulado en español, Dave Allen explica (no explicando) la religión católica.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Los ricos también lloran


La crisis también afecta al artista más rico del mundo Damien Hirst, el cual se ha visto obligado a despedir a veinte de sus empleados. ¿Un artista con empleados? Pues sí, en la más noble tradición de los artistas-artesanos, Hirst solo idea sus obras y deja que otros las realicen. Hirst tiene, nada menos, que ciento cincuenta empleados trabajando en su taller.

Los veinte empleados despedidos se dedicaban a hacer sus famosos armarios con pastillas:


y los cuadros con mariposas, es decir, los cuadros hechos con alas de mariposa:


El precio de un armario de pastillas: 11., 5 millones de euros, al menos por este precio se vendió en el 2007 su armario Lullaby Spring.

Al paso que vamos hasta yo me veré obligada a despedir a los enanitos que me hacen la cama, me barren, me escriben los posts para el blog, me pasan los informes a limpio.... la crisis.

domingo, 23 de noviembre de 2008

La aventura de Copérnico


El rostro de Copérnico, tal como era

Leo que gracias a la ciencia forénsica moderna, (qué suerte vivir en este milenio) se ha podido reconstruir la cara de Nicolas Copérnico.
Hace tres años se encontraron cuatro calaveras en la catedral de Frombork, en el norte de Polonia. Los arqueólogos sospechaban que una de ellas pertenecía a Nicolas Copérnico, el padre de la astronomía moderna, que vivió entre 1473 y 1543.
Científicos suecos y polacos acaban de confimar cual de ellas era la de nuestro hombre.¿Cómo lo han hecho?

Pues bien, contrastando el análisis del AND de un diente encontrado por los científicos polacos en la calavera con el análisis del AND de dos pelos encontrados por los científicos suecos en un libro que perteneció a Copérnico.
Este libro, el Calendarium Romanum Magnum de Johannes Stofler de 1518, fue a parar a Suecia como botín de guerra en el siglo XVII durante las guerras sueco-polacas. Actualmente se encuentra en la universidad de Upsala. Dentro del libro se encontraron los pelos que han servido para la identificación.

Gracias a la calavera y a los retratos existentes, los expertos forenses polacos han podido reconstruir la cara de Copérnico antes de su muerte, es decir a los setenta años. Para ello ayudó que en la calavera se veía una cicatriz encima del ojo derecho, algo también documentado en sus retratos.

A pesar de que Nicolas Copérnico me acompaña desde hace muchos años, nunca había sabido que era polaco y que su verdadero nombre era Nikola Kopernik.

El antiguo IES Montserrat en la calle Copérnico de Barcelona

Mi relación con Copérnico se remonta a mi época adolescente. El instituto donde cursé el bachillerato en los años setenta, en Barcelona, se encontraba en la calle Copérnico. El instituto Montserrat es en este momento una de las mejores escuelas públicas de la ciudad. El instituto tiene la fortuna de unir a un buen cuerpo docente, uno de los pocos edficios educativos de la ciudad con jardín. Encima de todos esto, el edificio está en la calle con el nombre del primer científico de la época moderna: Copérnico descubrió que la tierra da vueltas alrededor del sol y no al contrario, como hasta aquel momento se creía. Su enfrentamiento con la iglesia a causa de su teoría es ejemplar de como las explicaciones científicas han ido ganando terreno sobre las explicacions religiosas al paso de los últimos siglos.

Gracias a este cúmulo de afortunadas coincidencias, fue siempre facil para mí asociar el nombre de Copérnico al estudio y a la ciencia. Y ahora que se acerca el 2009 su nombre se vuelve aún más actual. Con su teoría heliocéntrica sentó las bases de la astronomía. Y la astronomía es el tema del año que viene. La Unesco ha hecho un llamado a todos los países para que dediquen el año que viene a la ciencia de la astronomía. Sobre todo en las escuelas, se pondrán en marcha todo tipo de proyectos dirigidos a familiriazar a los alumnos con el estudio de las estrellas.

Se puede decir que, realmente y en todos los sentidos, hemos recuperado a Copérnico... por los pelos.

En este vídeo se encuentra información sobre el El año de la astronomía, dura unos cinco minutos, y está subtitulado en español

sábado, 22 de noviembre de 2008

Europeana II

Y el mismo día, Europeana,tuvo que cerrar. Hubo tantos visitantes que bloqueó el sitio.

Muere a causa de su propio éxito.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Europeana

Un loable intento de reunir la cultura europea. La biblioteca Europeana tiene que poner toda la historia de Europa a la disposición del usuario a través de Internet.

Empecemos por la cultura.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Aquí no somos racistas

He encontrado en El Triangle, una revista política en catalán que se publica cada semana, este chiste de Pithecanthropus corruptus :
En el caso de que no lo hayas entendido del todo, ahí va la traducción:
- Un presidente negro en la Casa Blanca es histórico
- ¿Te imaginas que ocurriera en Europa?
- Imposible
- ¿Por?
- Aquí no somos racistas

Me ha gustado este chiste porque refleja muy bien la actitud europea ante las desigualdades raciales y sociales en Estados Unidos.
Seámos honestos: los europeos aún tenemos mucho camino por recorrer para llegar a la cohesión social europea con un gobierno común. Después de llevar treinta años viviendo en (el Norte de) Europa estoy convencida de que es imposible, al menos en los próximos doscientos años, que un inglés vote por un presidente francés, un sueco por un español o un holandés por un austríaco. Algo que sí ha logrado un austríaco en Estados Unidos.

En cuanto a las minorías que viven en cada uno de los países europeos tampoco lo tienen facil para integrarse. Si bien es cierto que en Rotterdam vamos a tener un alcalde de origen marroquí, la razón es porque no fue elegido por elección popular sino por un grupo de políticos encerrados en una habitación.

Por eso me sigue sorprendiendo la arrogancia que los europeos mostramos respecto al racismo y la discriminación en Estados Unidos.
También me sorprende la ingenua alegría de los europeos porque los Estados Unidos han elegido un presidente negro y demócrata, dos cualidades que no son ninguna garantía para Europa. No olvidemos que Obama antes que ser un símbolo de la liberación de las raza, papel que le hemos adjudicado, es un político estadounidense que va a barrer, lógicamente, para casa.

Por esto me ha gustado este chiste del Triangle: dos europeos autosatisfechos sentados en el sofá mirando la tele con, a un lado, el cuadro del Guernica, símbolo de la autodestrucción de 55 millones de europeos, y al otro lado, la bandera europea, símbolo del intento desesperado de los europeos de no matarnos entre nosotros durante el siglo XXI.

Es importante no olvidar quiénes somos y de dónde venimos.


(Este post está especialmente dedicado a mis amigos esparcidos por Europa)

sábado, 15 de noviembre de 2008

Vincent


En el tren entre Rotterdam y Breda a la altura de Dordrecht, noviembre 2008

El viernes estuve comiendo con mi amigo Vincent M. Nos conocemos desde hace veinte años. Los dos llegamos a Holanda en los años ochenta, él desde Estrasburgo y yo desde Barcelona. Hemos mantenido la amistad durante todos estos años a pesar de la distancia que nos separa. Vincent vive en Eindhoven en el sur de Holanda, y yo en Rotterdam. Como la distancia es larga y los dos llevamos vidas ocupadas nos encontramos un par de veces al año en medio de la ruta: Breda.

Recorrido entre Rotterdam y Eindhoven

El viaje en tren dura un poco de más de media hora para cada uno de nosotros, un viaje que vale la pena para poder mantener el contacto. Con ello me refiero al hecho de vernos cara a cara porque nos escribimos regularmente a través del correo electrónico. Sin embargo los dos sabemos que no es lo mismo.

Internet abre las puertas a la comunicación y al contacto con las personas que están lejos pero también puede cerrar las puertas a la comunicación con las personas en el mundo más cercano. Yo prefiero escribirme con Vincent desde el ordenador de mi casa que hablar con mi vecino de al lado. Gracias a internet me puedo aislar de mi alrededor. ¿Bueno o malo?

Ultimamente están llegando noticias de casos en los que el mundo virtual y el mundo real se acercan cada vez más creando a su paso un nuevo mundo de alternativas y dilemas. Tomemos el caso de la pareja inglesa que se divorcia a causa del adulterio del marido en el juego Second Life. En este game, el participante asume una personalidad virtual, llamada un avatar, con la que se monta una vida alternativa. En este caso el juego rebasó los límites de lo que la esposa real podía tolerar y, aunque los dos adúlteros no se conocen personalmente, consideró que la relación virtual era tan válida y amenazante como una relación real.
No solo el adulterio está rebasando los límites de la virtualidad. El crimen y la justicia también están cruzando este inasible umbral. En Holanda un juez condenó a un adolescente por haber robado dinero virtual a otro jugador en Runscape. Aunque durante el robo, un avatar golpeó al otro, el juez no consideró esta parte parte punible en la vida real pero sí el robo del dinero virtual.
No envidio a los jueces del siglo XXI, tendrán que tomar cada vez más este tipo de decisiones.

A la luz de todo esto me parece muy aconsejable no perder el contacto con las personas reales, particularmente, uno mismo. Razón por la cual pienso seguirme viendo con Vincent de vez en cuando, así comprobamos los dos que seguimos siendo reales y que el contacto humano es tan importante como el digital.

jueves, 13 de noviembre de 2008

El arte de conocer el arte

Mi padre me contó una vez que hablando de arte con su nieto, mi sobrino, le enseñó esta foto:
- ¿te gusta?
- pues sí, parece un Tapies- le dijo mi sobrino.
Mi padre entonces le confesó que no era un cuadro sino una foto de las obras de al lado de su casa. Y, para remachar el clavo, le dijo: - Seguro que no encuentro un lugar en obras donde hayan crecido las Meninas espontáneamente.

Esta forma divertida de mi padre de plantear la cuestión del arte moderno a mi sobrino me vino a la memoria al ver la obra de Barceló para las Naciones Unidas. La obra es sorprendente e indudablemente emana la vitalidad de Barceló. Pero como tantas veces en el arte moderno me queda la duda de qué es lo que estoy viendo.

¿Es pintura, es escultura, es una performance, es una búsqueda interesante, es una atracción de feria?.
Cuando veo a Barceló en las fotos disparando pintura acrílica en el techo del edificio (no sin cierta envidia, debe ser fantástico poder disparar chorros de pintura y que te paguen por ello), me pregunto, tal como el preguntó mi padre a mi sobrino: ¿si Miguel Angel hubiera usado un lanzapinturas, hubiera salido la Capilla Sixtina? Me temo que la respuesta es NO. Muchas horas de trabajo, un profundo conocimiento de las técnicas del dibujo, de la pintura, de la geometría, de la composición, de la perspectiva, un gran espíritu innovador y un carácter obsesivo fueron necesarios para que se materializara la Capilla Sixtina, la cual aún seguimos admirando.


Comprendo que la fotografía y los nuevos medios han liberado a la pintura de la reproducción fiel de la realidad y que no podemos juzgar el arte de ahora con las medidas del arte del Renacimiento. El miedo a la libertad también existe en el arte, aunque este miedo lo tengan más los que admiramos el arte que los artistas mismos. Como espectadores me da la impresión de que estamos todos completamente despitados. El precio astronómico de la obra de Barceló es la única indicación que tenemos en este momento de su calidad. Al igual que la calavera de Hirst, de la cual tenemos la pista de que es arte porque alguien ha llegado a pagar 75 millones de euros por ella. ¿De qué otra forma sabemos lo que es arte perdurable? Seguimos admirando la Capilla Sixtina pero, ¿por cuánto tiempo admiraremos la Cúpula de Barceló?.
Tendremos que esperar al impacto que nos provoque otro proyecto artístico aún más caro que éste para saberlo.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

San Obama

Una foto muy graciosa que encontrado en el blog www.guerraeterna.com y que resume el efecto del advenimiento de Obama en el mundo.

martes, 11 de noviembre de 2008

Coquetos


Parada del autobús 35 en Hillegersberg, Rotterdam

Estoy en la parada de autobús esperando el 35 mientras paseo arriba y abajo. Se me acerca un señor mayor que sale del supermercado con la cesta de la compra:
-Buena manera de hacer ejercicio- me dice- yo también lo hago, andar arriba y abajo-, y sin hacer una pausa me espeta:
-¿Cuánto años me pones?-.
Para mis adentros pienso que tiene unos ochenta años pero para no meter la pata le digo: - ¿unos setenta y seis?-.
- Pues no, - me dice triunfante- acabo de cumplir noventa y cuatro esta semana-, y sin esperar respuesta se aleja al trote, firme y decidido.
-¡Qué coquetería!- pienso para mis adentros.

Yo solo pienso en como ocultar mi inminente cumpleaños y este señor está orgulloso de la edad que tiene y de la energía que despliega.
En alguna parte hay una línea invisible que separa nuestros sentimientos sobre la edad. Mientras creemos que tenemos que ser competitivos en el mercado laboral y sentimental queremos aparentar ser más jóvenes de lo que somos. Nos avergonzamos de no resistir adecuadamente las embestidas del tiemp.
Viendo a este espabilado nonagenario me da la impresión de que, en lugar de avergonzarse, se enorgullece de haberse reído del tiempo.
Ultimamente he notado un aumento de coquetos ciudadanos senior, como les llaman los americanos, que no solo siguen dando su energía a la sociedad sino que además recalcan con gusto que son ¨de los que aguantan¨ riéndose de los dentelladas del tiempo.
Uno de los casos más espectaculares es el señor Leopoldo Abadía, un profesor de ingeniería jubilado que se ha hecho famoso en cuestión de meses. Al señor Abadía le ha llegado la fama a la temprana edad de setenta y un años gracias a la crisis financiera. Empezó explicando en su blog, para amigos y conocidos, el por qué de la crisis mundial de una forma tan clara que el número de lectores aumentó de una forma exponencial en cuestión de días. Cuando los periódicos y los medios de comunicación le descubrieron le llevaron a la fama de inmediato. El señor Abadía, una refrescante estrella mediática, no oculta su edad, al contrario, la proclama a los cuatro vientos al igual que sus campechanas explicaciones sobre el origen de la crisis.

Es un verdadero placer escucharle explicando su teoría Ninja. Es a la vez muy esclarecedor. Se lo recomiendo a juniors, mediors y seniors.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Marius Serra ve correr a su hijo

Me ha llegado este mensaje de Marius Serra:

Ja saps que mai no m'estic quiet. Tot just fa vint anys que vaig publicar el meu primer llibre, i ara em fa goig comunicar-te que avui ha sortit publicat el catorzè, Quiet, probablement el que m'ha costat més d'escriure.
Ya sabes que nunca estoy quieto. Ahora hace veinte años que publiqué mi primer libro y ahora me alegra comunicarte que hoy se publica el número catorce, Quieto, probablemente el que me ha costado más escribir.

Quiet és la narració de la vida al costat de mon fill Lluís, que va néixer fa vuit anys amb paràlisi cerebral, un estat que sovint ens exposa als fiblons del dolor, però en què predomina la joia. La narració desemboca en un foliscopi que ens permet veure'l córrer gràcies a una il·lusió òptica.
Quieto es la narración de la vida al lado de mi hijo Lluís, el cual nació hace ocho años con parálisis cerebral, un estado que a menudo nos expone a los pinchazos del dolor pero en el que predomina la felicidad.
LA NARRACION DESEMBOCA EN UN FOLIOSCOPIO QUE NOS PERMITE VERLE CORRER GRACIAS A UNA ILUSION OPTICA.

Em fa il·lusió fer-te saber que el proper dimarts, dia 11/11, en signaré exemplars a la segona planta de l'FNAC Triangle, a la plaça de Catalunya, de 7 a 9 del vespre.
Me hace ilusión hacerte saber que el próximo martes dìa 11 de noviembre firmaré ejemplarles en la segunda planta del FNAC Triangle, en la plaza de Cataluña entre las 7 y las 9 de la noche.


Màrius Serra
http://www.mariusserra.cat




Marius Serra y su hijo Lluís posando como si estuvieran participando en una carrera. A partir de esta foto se hizo el folioscopio, o flipbook, donde se ve a Lluís corriendo gracias al efecto óptico que se forma al pasar las páginas rápidamente. Marius Serra hace así realidad el sueño de ver a su hijo corriendo. En este vídeo de seis minutos se puede ver como lo ha hecho. Está hablado en catalán.

domingo, 9 de noviembre de 2008

La familia Piccard

Esta semana ha muerto uno de los hombres más importantes en mi vida. Sin haberle llegado a conocer personalmente tuvo una importancia fundamental en alegrar mi infancia y mi juventud.
Me refiero a Jacques Piccard, de profesión explorador oceanógrafo. Ha muerto a los 86 años en su casa suiza. Picard había visto un fondo del mar, en su batiscafo Trier, que no había visto nadie antes y que la gran mayoría de los mortales no veremos nunca. Una hazaña comparable a andar por la luna.
Jacques Piccard

Jacques Piccard formaba parte de una estirpe de exploradores: su padre fue Auguste Piccard y su tío, hermano gemelo de Auguste, Jean Felix Piccard. Los dos eran científicos, físicos y aeronautas. Auguste Piccard subió en globo aerostático a una altura récord hasta aquel momento. El padre subió a lo más alto y el hijo bajó a lo más fondo, expresión ésta que no es en nigún caso una metáfora porque las dos hazañas se midieron con el sistema métrico.

Auguste Piccard

La razón por la que estos dos hombres han sido tan importantes en mi vida es porque Auguste Piccard inspiró a Hergé la figura del famoso profesor Tornasol de las Aventuras de Tintín. Hergé declaró haber hecho al profesor Tornasol más bajo que el impresionante y larguirucho Auguste Piccard (en aquel entonces profesor en la universidad de Bruselas) porque sino no le cabía en la viñeta.

El profesor Tornasol o Professor Zonnebloem

Los álbumes de Tin-Tín están unidos a mi infancia de forma indeleble. Horas y horas de mi vida las pasé leyendo las aventuras de Tintin, tanto en catalán como en castellano. Me sabía las historias de memoria de tanto leerlas y releerlas. El profesor era uno de mis personajes favoritos. Su sordera era la causa de cómicos malentendidos, especialmente con el vociferante capitán Haddok. Gracias a estos libros viajé por todo el mundo sin moverme del piso de Barcelona y experimenté el placer de la lectura.

Estas lecturas probaron ser muy útiles cuando fui a vivir a Holanda y tuve que aprender holandés a marchas forzadas. Las lecturas de los libros de Tintín me ayudaron a aprender el idioma gracias a a) el apoyo visual de las viñetas y b) a que me sabía la historia de memoria y podía deducir lo que decían los bocadillos sin conocer todas las palabras.

La influencia de la familia Piccard no termina aquí porque, ya de mayor, he disfrutado de muchas horas de viajes por los espacios siderales al lado del capitán Jean-Luc Picard del USS Enterprise en la serie Star Trek, el epitema del explorador osado, curioso y estudioso.

Jean-Luc Picard

Gene Rodenberry, creador original de la serie, le dio el nombre de los Piccard a este capitán de origen francés proveniente de una familia de viticultores que rompiendo la tradición familiar se dedica a la astrofísica. El capitán Picard vuelve a los viñedos familiares, que ha heredado su hermano, en momentos de crisis. De las estrellas a la tierra.
En la realidad  los viñedos Picard se encuentran en Reims y son famosos por el champán Jacques Picard.

Los viñedos Jacques Picard

Si Star Trek engancha es gracias a personajes como Jean-Luc Picard, el explorador que se ve enfrentado consantemente a dilemas morales, culturales, militares y religiosos a causa de la continua búsqueda de mundos nuevos a la que se dedica. El espectador se siente involucrado en estos dilemas y se pregunta: ¿qué haría yo en este caso?, ¿es un ser hecho de mocos siderales menos vida que una unidad de carbono como yo?. Preguntas estas que nos hacemos constantemente los que vivimos en otro país del país que hemos nacido. La experiencia transcultural es también una forma de exploración porque uno vive situaciones nuevas, como Picard, para las que no hay guión previo ni cómodas tradiciones en las que apoyarse. 
En Star Trek se extrapolan estas cuestiones de tal forma que más que ciencia-ficción, se trata ya de sociología- y filosofía-ficción.


Por suerte, aún queda un Piccard que ha heredado el chip explorador de sus antecesores. Bertrand Piccard, siguiendo la tradición familiar, fue el primero en dar la vuelta al mundo en globo (no Phileas Fogg) aerostático. Siguiendo también la tradición familiar, Bertrand no solo explora lo más alto sin también lo más fondo... del alma humana, ya que es también psiquiatra.

Bertrand Piccard

Que yo sepa, este último Piccard aún no ha sido revertido en una figura de ficción. A mí ya se me está ocurriendo una obra de teatro mientras escribo esto: durante una comida de Navidad de la familia Piccard, de repente, y cuando se están contando las  batallitas a la hora de los turrones,  se materializa el ectoplasma de Julio Verne, el cual no puede resistir la tentación de hablar de su última idea, el viaje en el tiempo, con esta familia de locos maravillosos. ¡Ya me imagino las tres generaciones peleándose para ser el primero en meterse en la máquina del tiempo!

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Piernas delgadas y cabeza bien amueblada


La elección de Obama es única en la historia y no lo es. Como decía Paul Krugman en El País, en momentos de crisis no eliges a alguien con quien te puedes tomar una cerveza, sino alguien serio, alguien de quién te puedas fiar, al menos de su inteligencia. Hoy se ha confirmado que un carácter equilibrado, inteligente y de suaves maneras triunfa en momentos de crisis.

Esta observación de Krugman me recuerda otros dos casos de elecciones sorprendentes en la historia que a la larga resultaron muy acertadas. Frankin Roosvelt, medio paralítico y ocultando a duras penas que casi no podía andar, fue reelegido en 1940, un momento crítico a causa del inicio de la guerra europea. Un inválido como comandante y jefe. Ahora bien, un inválido que había cambiado el país con su New Deal.
En Europa, Gran Bretaña se inclinó por otro peculiar comandante y jefe: un viejo político y un político viejo. Una elección también acertada, tal como demostró la historia.

Los dos tenían algo más importante que la fuerza física, tenían experiencia, inteligencia, sentido común y una gran fuerza de voluntad.

Barack Obama parece tener todas cualidades mentales y físicas de estos dos grandes líderes, no olvidemos sus ¨piernas delgaditas¨ tal como le echó en cara el gobernador de California en su cómico discurso.